jueves, 17 de octubre de 2013

Los armenios recuerdan a San Gregorio El Iluminador.



VARTAN KARAPETIAN
Embajada Armenia ante la Santa Sede
“Hay muchos San Gregorios en la Iglesia católica, pero no todo el mundo conoce al San Gregorio armenio.”

En el año 301, San Gregorio armenio fue el artífice de la conversión de Armenia al cristianismo. De hecho, Armenia es la primera nación que adoptó el Cristianismo como religión oficial.

Y Gregorio no lo tuvo nada fácil. Durante un ritual pagano, el rey descubrió que era cristiano. Como castigo, fue torturado y encerrado en un pozo durante 13 años. Fue liberado tras curar milagrosamente al rey.

VARTAN KARAPETIAN
Embajada Armenia ante la Santa Sede
“Tras ser liberado, bautizó al rey de Armenia y Armenia se convirtió al Cristianismo.”

Junto al pozo de Gregorio, se construyó esta iglesia, cerca del monte Ararat. Hoy es uno de los lugares de peregrinación más populares del país.

La devoción por San Gregorio está presente tanto en la Iglesia armenia como en la católica. De hecho, hay una estatua de San Gregorio en el Vaticano, en el exterior de la Basílica de San Pedro. En el año 2.000 Juan Pablo II donó unas reliquias de San Gregorio al Catolicós de la Iglesia armenia.

VARTAN KARAPETIAN
Embajada Armenia ante la Santa Sede
“Hay una segunda parte de la exposición centrada en la dispersión de sus reliquias. San Gregorio está en Constantinopla, en Roma, en Nardò y muchos sitios más.”

Con esta muestra, la Embajada Armenia ante la Santa Sede no sólo celebra el legado de San Gregorio sino también un nuevo capítulo en las relaciones diplomáticas con el Vaticano. El pasado verano, envió a su primer embajador permanente. Es una conexión que, en cierto modo, se remonta a las raíces, a la evangelización y al legado de San Gregorio el Iluminador.